Suicida
Me gustaría empezar aclarando que estoy muerto de algunas formas pero al mismo tiempo me encuentro muy vivo casi cómo las estrellas que aunque puede que estén muertas en el ahora son la máxima expresión de vida, cuanta ironía.
Suicidio corporal:
Casi la totalidad de nuestras sensaciones son limitadas por el cuerpo, por el ligamiento terrenal, un ser ávido de curiosidad de conocimiento puede llegar a hacer locuras a cambio de experiencias vacías, pero ahí está el dilema de dejar algo cómo desconocido teniendo la súbita oportunidad de experimentar alguna demencia.
Empezaré por la decisión, que se toma con locura o cordura, da igual, el resultado va a ser el mismo independientemente de las circunstancias circundantes ya que el primer paso es el inicio de lo sempiterno que tiene una única salida, visceral. Estar muerto acarrea demasiada paz, un silencio que ensordece, la calma agita hasta revolverlo todo en una mezcla sin sentido, una locura nunca mejor expresada y me pregunto si eso será mejor que el vivir, todo tiene una perspectiva y si estar muerto significa tranquilidad también puede significar aburrimiento, monotonía; y por su lado el estar vivo puede significar energía interminable pero también quemaduras de estrés, el exceso de vida es cancerígeno, pero es necesaria, así como la muerte.
Aquí empieza una lista de la que aseguro jamás terminaré, es un compromiso infinito que debido a su misma naturaleza interminable, no lograré culminar, pero eso está bien.
Suicidio cognitivo:
Sin dudas el más común de todos; (eso si no es que todos los del común poseen mentes maestras y simulan a la perfección su verdadero pensamiento) abarca abandonar la capacidad de cuestionamiento sobre todas las cosas que podemos percibir mediante nuestros pobres cinco sentidos, es conformista, es egoísta suicidarse de esta manera y aún más egoista asesinar a quienes apenas están conociendo sus capacidades de este tipo, hay que ser un terco-rebelde-empedernido para poderse salvar de esto hoy día porque las cosas banales se han vuelto tan esenciales... Intentaron asesinarme y las secuelas son obvias, no obstante creo poder pertenecer al pequeño grupo de sobrevivientes, me intriga encontrar explicaciones más... mágicas acerca de la obviedad de la naturaleza, por lo menos.
Suicidio social:
Aunque no parezca, estos muertos vivientes pueden relacionarse muy bien con los demás debido a la máscara de simpatía que han desarrollado pero nadie (en verdad nadie) conoce realmente su verdadero ser; el mundo paralelo en el que viven es un enigma, tengo demasiada curiosidad por saber que esconden las personas y más aún una tan cerrada en sí, me pregunto si podré entender el lenguaje en el que se han codificado pero bueno... están muertos y eso es una triste realidad irrescatable y todo lo que esconden será para sí mismos, no existe la confianza, no existe la esperanza ni el interés verdadero en otros mundos, se han sellado. Puede que halla considerado volarme la sien dejando un agujero del otro lado, pero mi curiosidad no me dejó y me he maravillado así que supongo que tomé una buena decisión.
Suicidio emocional/sentimental:
Este se caracteriza por su grotesca manera de realizarse, realizar un corte en una arteria vital del alma hasta drenarla por completo es bastante doloroso y usualmente requiere de una ayuda externa, es hermoso observar los lugares donde la gente se ha cortado, la sangre intangible es de muchos colores, cada color podría traducir una emoción y ver todo ese revoltijo de colores es cómo un arcoiris, una locura, un desequilibrio necesario para llegar al valle del vacío. El frío debe ser insoportable pero no soy alguien para hablar al respecto. Que no se confunda con el desprecio ya que eso acarrea un sentimiento, es más bien comparable con el espacio vacío, desértico sin señales de vida, completamente neutral, hostil.
Suicidio corporal:
Casi la totalidad de nuestras sensaciones son limitadas por el cuerpo, por el ligamiento terrenal, un ser ávido de curiosidad de conocimiento puede llegar a hacer locuras a cambio de experiencias vacías, pero ahí está el dilema de dejar algo cómo desconocido teniendo la súbita oportunidad de experimentar alguna demencia.
Suicidio de amor:
Aunque esté muy ligado al suicidio emocional, es totalmente diferente, o por lo menos según mi vista de la verdad. El ser se abriga en una manta embriagadora de energía oscura, el aura vengativa toma el control, y todo lo que se le ocurra opuesto al amor, trascienden de ideas y planes a acciones, los demás parecen ser culpables y se quita impunidad a los corazones buenos; "el amor es una mierda", pero que ridiculez tan grande. Me gustaría morir, pero no del todo, quisiera encerrarme en mi propio trance,
porque estoy saciado,
no quiero comer más, pero me digo:
hambriento, sediento,
de sueños.
No quiero despertar, pero me digo:
agotado, somnoliento
por ti.
Suicidio espiritual:
Tristeza, vacío, incertidumbre, pero lo que más duele es la soledad, pasar mucho tiempo consigo mismo no es algo tan sano al fin y al cabo, hay respuestas que simplemente sólo la magia puede resolver, las vibraciones del universo pasan de largo de los cuerpos sin espíritu haciendo que el aroma de la muerte se haga cada vez más fuerte, los cuervos acechan y cuando la nube negra se halle encima, no habrá vuelta atrás, ya te habrás ahogado.
Te mataré y te traeré a la vida
Asesinaré, me suicidaré.
Derrotaré a la muerte, seré la muerte.
Dame chance, ¡te mataré sin piedad!
por ti.
Suicidio espiritual:
Tristeza, vacío, incertidumbre, pero lo que más duele es la soledad, pasar mucho tiempo consigo mismo no es algo tan sano al fin y al cabo, hay respuestas que simplemente sólo la magia puede resolver, las vibraciones del universo pasan de largo de los cuerpos sin espíritu haciendo que el aroma de la muerte se haga cada vez más fuerte, los cuervos acechan y cuando la nube negra se halle encima, no habrá vuelta atrás, ya te habrás ahogado.
Te mataré y te traeré a la vida
Asesinaré, me suicidaré.
Derrotaré a la muerte, seré la muerte.
Dame chance, ¡te mataré sin piedad!
Después del ocaso carmesí,
viene la maravillosa noche,
fría, refrescante,
dónde los muertos regresan al mundo,
a hacer sus fechorías,
a amar,
a sentir....
Cuando regreses, llévame, quiero ver cómo eras en vida.
Y si, efectivamente:
yo también estoy cómo jodido.
Estigia
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