Entendiendo la vida

Estoy teniendo un ataque de euforia, estoy demasiado feliz, finalmente me di cuenta que es lo que Dios estaba queriendo decirme por un largo tiempo, es algo como que la vida es demasiado corta para andar triste y deprimido, hay que quitarle importancia a las cosas que dejan de hacernos felices, puede verse desde un punto egoísta pero si estamos contentos, al ver esto las personas allegadas, las que realmente importan, las que en verdad nos quieren, se alegraran por nuestro estado, haciendo una cadena de alegría en un circulo de personas que finalmente se quieren unas a otras, la emoción se contagiará y la gente va a empezar a vivir y eso es lo que más importa en esta vida, vivirla.
A alguien le puede servir esta información que he desglosado hoy. Con respecto al amor, es de doble filo y a menos de que sea el verdadero, el predestinado (o sea, una en un millón), no hay que tomárselo tan enserio, la persona con la que te vas a casar y a formar un hogar o lo que sea que quieras hacer, está ahí, no la busques, llegará. De momento disfruta con tus amigos, haz lo que te haga sentir vivo y feliz.

Citando las palabras del diario de las monótonas alegrías: ¡Sean felices!

La piscina del diablo - Zimbabue
La caída de la resurrección